INTERVENCIÓN PSICOLÓGICA EN DOLOR CRÓNICO
Pasado 12 de mayo se celebró Día Internacional de la Fibromialgia. Los datos revelan que los pacientes con fibromialgia acuden con más frecuencia a las consultas de Atención Primaria, Reumatología y Salud Mental, y se destaca que más de 70% de estos pacientes presenta un sufrimiento psicológico y físico que debe ser abordado a través de la terapia psicológica.
Pero ¿qué es la fibromialgia? Es una enfermedad que cursa con dolor crónico generalizado de difícil tratamiento, que está estrechamente relacionada con trastornos psicológicos y psiquiátricos, entre los cuales destaca la ansiedad y la depresión.
Su origen es desconocido pero entre las causas de la misma se baraja el estrés y dolor crónico, la frustración personal, la automedicación, la falta de eficacia de los tratamientos, etc.
También los problemas laborales, familiares y sociales afectan al estado anímico del paciente, pudiendo verse abocado a la automedicación, ya sea para paliar el dolor que sufre, para tratar otros síntomas asociados (como los trastornos del sueño), o para intentar sobrellevar esos sentimientos de culpabilidad, desesperanza y desesperación.
En consecuencia, esta situación provoca un estado de desánimo que el paciente no es capaz de asumir, aumentando su intensidad y creando un círculo vicioso en el que los síntomas de fibromialgia incrementan la sensación de desesperación, lo que deriva en un empeoramiento de las alteraciones psicopatológicas, e impide solucionar y sobrellevar la enfermedad.
Autora: Emilia Cierlitzka